A todos nos gusta llegar a casa y que un aroma agradable nos dé la bienvenida. Sin embargo, es cierto que la oferta que nos ofrece el mercado es abrumadora y, por supuesto, los gustos al respecto son bastante dispares: velas, ambientadores, flores naturales, palitos mikado… Pero no te preocupes, sigue leyendo y descubre los mejores ambientadores para casa.
No siempre es fácil encontrar un aroma que satisfaga a todos. Algunos se quejan de los que son demasiado intensos, a otros todo les sabe a poco y muchos prefieren lo natural y evitan los productos de fabricación industrial. Al fin y al cabo la fragancia de nuestra casa es algo muy personal. Por eso, a continuación te ofrecemos algunos ejemplos.
Tenemos infinidad de opciones, tantas como para probarlas todas durante un año entero. Pero, tranquilo, si sigues leyendo no tendrás que hacerlo, porque con estos consejos acertarás a la primera… Bueno, o a la segunda.
Vamos a ello: en el mercado encontramos diferentes tipos de ambientadores dependiendo del tipo de soporte para su difusión: velas, bolsitas aromáticas, pulverizadores, esprays o los populares difusores eléctricos, entre otros muchos.
Por supuesto, también debemos hablar de algunos ambientadores más naturales, que recurren a esencias concentradas, otros que incluyen en su formulación químicos como formaldehídos, diclorobenceno, aerosoles, y otros derivados del petróleo. Como habrás imaginado, estos últimos despiertan ciertos recelos entre aquellas personas que prefieren decantarse por productos naturales, cuya fabricación, uso y residuos no afecten al medio ambiente.
En este artículo vamos a centrarnos en la forma de difusión de los ambientadores, así como en su soporte:
Estos son los más clásicos ya que fueron de los primeros en irrumpir en el mercado. Este tipo de ambientadores se presionan de manera manual y están libres de aerosoles, por lo que no perjudican al entorno. El único inconveniente es que los tendrás que tener continuamente a mano porque su efecto dura muy poco.
Podrás disfrutar de su olor de forma inmediata, pero su duración es corta y ello te obligará a estar continuamente accionándolos. Además, podemos comprarlos con y sin agua. Sea el que sea, procura no utilizarlos en cualquier espacio, pues contienen ingredientes que pueden ser tóxicos sobre la comida o incluso dejar manchas sobre muebles o textiles.
¿A quién no le gusta encender una vela aromática y disfrutar de un ambiente bonito y hogareño? Este soporte tan decorativo solo tienen un inconveniente: en casas con niños pequeños puede resultar una opción peligrosa y en todas hay que situarlo alejado de textiles y zonas de paso donde podamos golpearlas sin querer.
Las de cera de abeja, además, son las más adecuadas para aquellas personas que sufran algún tipo de alergia.
Esta opción es ideal para espacios como armarios o cajones. Así tu ropa de cama y tus prendas preferidas mantendrán un aroma único durante mucho tiempo. Así, cada vez que hagamos el cambio de ropa de temporada, este truco nos podrá ayudar a conservar una estupenda fragancia en las prendas a pesar de los meses que lleven guardadas.
Estamos ante otra manera de ambientar que goza de gran popularidad y, además, no consume energía. Solo tendrás que colocar en el lugar que te apetezca estas varitas de fibra que van desprendiendo su aroma al contacto con el aire.
Su uso es muy sencillo: se colocan dentro del recipiente que contiene el aroma y poco a poco empiezan a absorber el líquido y a emanar su aroma. Ya verás cómo te vuelves un asiduo de este sistema.
Estos aparatos utilizan resistencias eléctricas para calentar el líquido y lanzar sus vapores a través de un sistema de turbina. Muchos de ellos permiten regular la intensidad e incluso existen modelos que combinan la función de ambientador con la de humidificador. Por lo tanto, podrás respirar profundamente y ganar tanto en una mejora de la calidad del aire de tu casa como en un aroma muy especial y de tu agrado.
Recuerda que cada estancia reclama su propia fragancia, así que no cometas el error de escoger la misma para el salón, los dormitorios, la cocina o los baños. Toma nota de estos breves consejos:
No obstante, recuerda que de poco servirá contar con ambientadores en casa si, cuando llega la hora de preparar la comida, te olvidas de activar los extractores de la campana. En el caso de que esto suceda, ponlos en marcha en cuanto te des cuenta y procura abrir alguna ventana.
Por último, aunque los ambientadores hacen su papel, no olvides recurrir a plantas y ramos de flores, sobre todo en primavera y verano. Prueba a añadir rosas, ramas de mimosas o plantas como el galán de noche… La naturaleza es el ambientador más poderoso y natural que podemos encontrar.